EL AMOR SOLO PUEDE EXISTIR DESPUÉS DE HABER MEDITADO;
ANTES NO.
ES UNA LEY EXISTENCIAL BÁSICA.
ANTES DE MEDITAR SOLO HAY DESEO,
SOLO HAY SEXUALIDAD.
ANTES DE MEDITAR ERES UN ANIMAL,
REALMENTE NO ERES UN SER HUMANO.
LA TRANSFORMACIÓN SE PRODUCE MEDITANDO:
TE VUELVES HUMANO, Y EL AMOR SURGE DE
TU HUMANIDAD.
CUANDO LA MEDITACIÓN LLEGA A SU CUMBRE,
AL EVEREST DE LA CONSCIENCIA,
SE VUELVE A PRODUCIR OTRO CAMBIO.
LA CIENCIA DICE QUE PARA QUE SE
PRODUZCA UN CAMBIO CUALITATIVO TIENE QUE HABER UNA CANTIDAD DETERMINADA.
EL AGUA NO SE EVAPORARÁ SI LA HIERVES HASTA LOS NOVENTA Y
NUEVE GRADOS.
SOLO OCURRE A LOS CIEN GRADOS.
Y NADIE SABE POR QUÉ.
ESTO HACE QUE LA VIDA SEA UN MISTERIO.
CUANDO LLEGAS A CIERTO NIVEL
—CUANDO
PUEDES ALCANZAR ESE ESTADO CON GRAN FACILIDAD
SIN QUE SE QUEDE ALGÚN PENSAMIENTO RELEGADO—,
MEDITAR ES TAN FÁCIL COMO RESPIRAR.
Y PARALELAMENTE, A TRAVÉS DE LA MEDITACIÓN
PASAS DE LA SEXUALIDAD AL AMOR.
POR MEDIO DE LA ILUMINACIÓN TE CONVERTIRÁS EN AMOR.
NO ES UNA CUESTIÓN DE AMAR A NADIE;
ES TU PROPIA PRESENCIA.
TU PRESENCIA ES AMOR.
CUANDO LA PRESENCIA DE ALGUIEN SE
CONVIERTE EN AMOR,
HA CUMPLIDO SU DESTINO.
MÁS
ALLÁ NO
HAY NADA.
HA LLEGADO AL MÁS ALLÁ.
OSHO